La inflación aumenta en un 2,7% respecto a años anteriores y provoca una subida estimada del IPC del 7,3% en la economía española
La subida de precios en los productos alimentarios se muestra como uno de los principales focos que producen ciclos de recesión económica como el actual. Conflictos como el de Rusia-Ucrania han provocado situaciones de fuerte inestabilidad en el mercado agroalimentario. Derivada de estos conflictos, la interrupción en la importación de los alimentos y la subida del precio de algunos productos como el cereal o el aceite han afectado a la cesta de la compra de muchos españoles.
En comparación al 2021, la cesta de la compra registra un coste total un 15% más caro respecto a datos anteriores. Los españoles gastan más en sus compras alimentarias que en el 2020. Algunos productos básicos como el aceite de girasol, el azúcar, las harinas o la mantequilla se han disparado más de un 30% desde octubre de 2021. A su vez, los datos del INE señalan que, en la cesta de la compra, más de 60 productos han aumentado más de un 10% su importe durante los últimos 12 meses. La subida de precios se ha visto reflejada en más de 200 productos y servicios, según concluye el informe del INE.
Estas elevadas tasas de inflación perjudican en mayor medida a las familias más vulnerables, para quienes el consumo de productos básicos como los alimentos y la energía absorben la mayor parte de su presupuesto mensual. Sin embargo, esta alza en los precios no ha sido igual en todas las comunidades autónomas. En Comunidades Autónomas como Extremadura, Andalucía o Murcia los alimentos se han llegado a encarecer hasta un 15% en el último año, mientras en otras como Cataluña o Baleares la subida ronda el 11%, según han reflejado los datos de este 2022.
Los alimentos que preocupan al bolsillo de los españoles
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), los tres alimentos que se encuentran en el top son el pan, los cereales y la carne (entre las que destacan la de ovino, porcino y vacuno), seguida por el pescado, los huevos y la leche. Según los datos más recientes del IPC del mes de agosto, los alimentos acumulan una subida media del 13,8% en un año, con incrementos que llegan al 25,1% en la leche; al 23,8% en aceites; al 23,6% en huevos; al 22,3% en cereales y al 14,9% en el caso del pan. El pollo acumula una subida anual del 18,1% y el pescado, del 10,6%. Por su parte, los alimentos para bebés también han sufrido un aumento en su coste, que representa un crecimiento del 17,7% en un año.
Un futuro incierto
Europa se ha coronado como una de las principales afectadas por este fenómeno económico durante este 2022. Dentro del territorio europeo destacan por una mayor alza en los precios los países del este, que representan un aumento del 17,5% respecto a años anteriores. Por su parte, las empresas del sector han desviado el foco del problema hacia el aumento de costos en las energías. Mientras, el Banco Central asegura que un abaratamiento de estos costos no mejoraría la situación.
En cuanto a las previsiones futuras, se prevé una improbable bajada de precio a lo de hace un año y se calcula que el aumento durará por lo menos hasta 2025. Las previsiones de la Comisión Europea y el Banco Central respecto a la inflación prevén que el año concluya con un incremento en el valor de los alimentos del 18%, a su vez, auguran un descenso del 6% durante el año posterior que provocará una estabilidad de los precios en el año 2024. Sin embargo, advierte de que el equilibrio es precario y hay muchos factores que pueden alterar las previsiones, siendo aún una realidad de cara a 2025.
Ponte a prueba…
La inflación ha hecho que los alimentos más consumidos sean cada vez más caros. Hacer la lista de la compra y llenar la cesta se ha convertido en un verdadero desafío de cálculo. ¿Sabrías adivinar el precio de estos productos después de la inflación?