Aprovechando este partido, repasaremos también otras de las rivalidades mas importantes del futbol catalán.
Sabadell y Terrassa volvieron a verse las caras en la Nova Creu Alta este 8 de diciembre en un partido correspondiente a la decimoquinta jornada del grupo III de segunda RFEF, la cuarta categoría del fútbol español. Los 9123 espectadores llevaban años esperando este partido, uno en el que la rivalidad va mucho más allá del fútbol. El derbi del Vallès lleva detrás toda una disputa social por ver cuál de las dos ciudades es más importante dentro de la comarca de la que forman parte, el Vallès Occidental, de la que ambas son capital.
Mas pasión que fútbol
El Sabadell, líder de la competición, partía como favorito ante un Terrassa que se encontraba onceavo en la tabla. Pero las expectativas no siempre se ajustan a la realidad, y en el estadio se vió un partido muy disputado. Ambos equipos gozaron de pocas ocasiones claras, y, a pocos minutos del final, el árbitro anuló un gol al delantero Aythiami del Terrassa por un polémico fuera de juego. Finalmente, el partido terminó con un empate a 0 que no terminó de convencer a los fanáticos del Sabadell y que dejó algo más satisfechos a los egarenses. En la primera parte hubo algunas disputas entre la grada del Terrassa y los aficionades locales, pero el partido pudo disputarse con total normalidad.
La afición del Sabadell canta el himno antes del pitido inicial. En la esquina izquierda, la grada visitante con los fans desplazados del Terrassa
¿Qué ha pasado en estos 14 años que no se han enfrentado?
La última vez que se enfrentaron entre ellos fue el 24 de enero de 2010, en un partido que el Sabadell ganó por 2 a 0, cuando ambos equipos se encontraban en segunda división B. Esa misma temporada el Terrassa quedó último y descendió a tercera división. Desde entonces, los dos equipos no se volvieron a encontrar en la misma categoría hasta el día de hoy: El Sabadell logró ascender a Segunda División en 2011 y se mantuvo hasta 2015, peleando por la permanencia a excepción de la temporada 13/14, donde logró un cómodo décimo puesto. El equipo estuvo en Segunda B entre 2015 y 2020, cuando lograron volver a Segunda División, aunque esta vez el paso fue más breve, ya que descenderán al acabar la temporada 20-21.
Por su lado, el Terrassa pasó 10 temporadas consecutivas en Tercera División. En 2021 logró por fin el ascenso. Si bien parecía que en la 21/22 ambos equipos se reencontrarían en Segunda B, la RFEF ya tenía pactada la reestructuración de la categoria en dos nuevas divisones: Primera RFEF, donde jugaría el Sabadell, y Segunda RFEF, donde jugaría el Terrassa. Ambos equipos se mantendrían en estas categorías hasta el descenso del Sabadell la pasada campaña 2023/24, que por fin les ha hecho coincidir esta temporada. El destino tampoco quiso que estos equipos se enfrentaran en competiciones que han compartido, como la Copa Catalunya o la Copa RFEF.
Historia del derbi
El primer derbi entre Sabadell y Terrassa se jugó en 1913, un encuentro que terminó 4 a 1 dando como ganador al Sabadell. Desde entonces, estos dos equipos se han enfrentado un total de 76 veces en partido oficial. En todos estos encuentros el Sabadell ha obtenido un total de 34 victorias, mientras que el Terrassa se ha llevado la victoria en 22 ocasiones. El derbi del Vallés ha terminado en tablas un total de 20 partidos, dato al que hay que sumar el empate del encuentro disputado el pasado 8 de diciembre en la Nova Creu Alta. Este 15 de Enero el derbi escribirá una nueva página en su historia, en un partido correspondiente a los octavos de final de la Copa Catalunya.
Otras grandes rivalidades del futbol catalán
Europa – Sant Andreu
El CE Europa nació en 1907 como uno de los fundadores y participantes de la Primera División española. Aunque actualmente se encuentra en Segunda Federación, el equivalente a la cuarta división nacional, es innegable el reconocimiento como uno de los grandes equipos del fútbol catalán. Pese a que únicamente estuvo tres temporadas, su nombre ya está en la historia del deporte español.
El rival más directo del Europa es la Unió Esportiva Sant Andreu, que fue fundada en 1909. Con sede en el Narcís Sala, los quatribarrats se han consolidado como uno de los equipos más importantes de la ciudad, ya que llegó a estar 11 campañas en Segunda División
Este enfrentamiento, que surge de una mezcla de rivalidades locales y la necesidad de un nuevo foco competitivo tras los descensos de sus rivales históricos, ha cobrado fuerza especialmente entre los jóvenes de los barrios de Gràcia y Sant Andreu en los últimos tres años especialmente, dónde han coincidido en tercera RFEF en la 22/23 y en segunda RFEF estas dos últimas temporadas.
Horta – Martinenc
Estos clubs históricos catalanes pertenecen al distrito barcelonés de Horta-Guinardó.
Actualmente el Horta se encuentra en una situación mejor económicamente. Se fundó en 1922 y disputa sus partidos en el Estadi Municipal d’Horta Feliu y Codina. Actualmente juegan en la Lliga Èlit catalana
Por su parte el Martinenc, fundado en 1909, juega en el Camp del Guinardó. Está temporada está disputando sus partidos en el grupo dos de la Primera División Catalana.
Sants – Europa
El UE Sants, según indica el historiador Xavier Vidal, siempre había sido el rival histórica del Europa. Actualmente no juegan en la misma categoría pero su rivalidad nos lleva hasta la década de 1950 donde ambos equipos demostraron un gran nivel que potenciaba la rivalidad entre ambos.
La UE Sants está situada en el distrito de Sants-Montjuïc. Fue fundada en 1903 y juega en el campo de la Energía. Actualmente no está pasando por su mejor momento ya que lleva dos descensos consecutivos.
- Reus FC Reddis- Gimnàstic de Tarragona
El Reus FC Reddis, nació en 1922 con el nombre de FC Catalunya de la fusión de los clubes Unió Esportiva y Català y en la década de 1930 pasó a llamarse Catalunya Nova hasta el final de la Guerra Cívil, cuando fue forzado a llamarse Club Deportivo Nacional. No fue hasta 1941 que recibió el nombre de Reus Deportiu. Debido a problemas económicos, el equipo dejó de competir en enero de 2019, cuando se encontraba en mitad de temporada en segunda división y desapareció definitivamente en 2020. En 2021, el club Reddis CF, el filial del anterior Reus Deportiu y los aficionados se unieron para fundar el actual Reus FC Reddis, que compite en Tercera RFEF.
El Gimnàstic de Tarragona, también conocido como Nàstic nació en 1886 como un club de gimnasia. No fue hasta el año 1914, con la absorción del Club Olímpic, que el club comenzó a competir en fútbol. Desde entonces, ha llegado a disputar 4 temporadas en primera y 22 en segunda, convirtiéndose en el club mas importante de la provincia de Tarragona.
La rivalidad entre estos dos clubes se remonta a la rivalidad que existe entre las dos ciudades desde hace muchos años al ser Tarragona la capital de la provincia. Esta rivalidad pasó de las calles al campo de fútbol convirtiendo estos dos clubes en importantes rivales que transmiten esa pasión mediante el juego. Este derbi vivió uno de sus mejores momentos entre los años 2016 y 2019, cuando ambos equipos coincidieron en segunda división.
El 23 de septiembre de 2018 se disputó el último Reus-Nàstic hasta la fecha. El resultado fue un empate a 1. Foto: Diari Ara
Tremp – Pobla de Segur
La rivalidad deportiva, particularmente en el fútbol, ha sido uno de los aspectos más visibles de la competencia entre Tremp y Pobla de Segur. Los equipos locales de ambos pueblos, el CF Pobla de Segur y el UE Tremp, se enfrentan regularmente en competiciones locales o regionales, generando una atmósfera de alta tensión en cada partido. Estos partidos suelen atraer a gran parte de los habitantes de ambos municipios, y el ambiente es de alta rivalidad, con los hinchas de cada equipo apoyando apasionadamente a su localidad.
Ambas poblaciones tienen una identidad local muy marcada. Tremp es la capital de la comarca del Pallars Jussà y suele tener un enfoque más urbano y administrativo, mientras que Pobla de Segur, aunque también cuenta con su propio carácter y atractivos, se considera más un pueblo tradicional y rural. Las diferencias en sus estilos de vida y su relación con la comarca fomentan un sentimiento de competencia.
Figueres- Palamós
La rivalidad entre los equipos de fútbol de CF Figueres y Palamós CF se ha consolidado en el ámbito futbolístico en diversas categorías. Ambos clubes han jugado en categorías superiores y han tenido diferentes momentos de protagonismo a lo largo de los años. A pesar de que ninguno de los equipos ha alcanzado grandes logros a nivel nacional, la rivalidad en los enfrentamientos directos, tanto en casa como fuera, ha sido muy importante para la identidad local.
Los enfrentamientos directos entre el CF Figueres y el Palamós CF han sido durante años el punto culminante de esta rivalidad. Estos partidos suelen ser muy intensos, no solo en lo deportivo, sino también en lo emocional, ya que los aficionados locales suelen mostrar una gran pasión por su equipo. La rivalidad se intensifica aún más cuando se trata de partidos de competiciones importantes o locales, en los que el «derbi» regional se convierte en una cuestión de orgullo.
Balaguer – Tàrrega (Camp Municipal Joan Capdevila)
El CF Balaguer y el CF Tàrrega han sido dos de los clubes más representativos de sus respectivas localidades en el fútbol catalán. Aunque ambos equipos han competido principalmente en categorías regionales como la Tercera División Catalana y la Segunda Catalana, sus enfrentamientos han sido de gran importancia local. El historial de partidos directos entre ellos ha sido el principal motor de la rivalidad, especialmente en aquellos momentos en que ambos equipos se jugaban el ascenso o la permanencia en categorías superiores de la liga catalana.
Para las comunidades de Balaguer y Tàrrega, el fútbol no es solo un deporte; es una cuestión de identidad local. Cada partido entre ambos equipos representa una oportunidad para demostrar quién manda en la zona. El orgullo de la localidad se pone en juego, y esto se traduce en una gran pasión tanto en las gradas como en las conversaciones cotidianas entre los habitantes. La victoria de uno de los equipos es vista como un logro colectivo de toda la ciudad.
