Paula Torrico, Raúl Vázquez, Noèlia Pérez, Marta Valverde, Eugénia Yúfera y Cesc Sarri
Tal día como hoy se hizo efectiva la Carta de las Naciones Unidas ratificada por los representantes de 50 países que se reunieron en San Francisco
Con el fin de evitar una posible tercera guerra mundial, el 24 de octubre de 1975 países de todo el mundo creaban la Organización de las Naciones Unidas (ONU), un organismo internacional que lucha para mantener la paz y proteger los derechos humanos. En la actualidad, 77 años después, continúa trabajando para lograr estos objetivos, a la vez que afronta nuevos retos globales como la emergencia climática.
En plena Segunda Guerra Mundial (1939-1945), los aliados, incluidos Estados Unidos, el Reino Unido, China y la Unión Soviética, elaboraron un documento de propósitos al que llamaron Declaración de las Naciones Unidas. El objetivo era firmar un compromiso para luchar contra las Potencias del Eje.
Poco tiempo después, otros 21 países se adhirieron. Esto no sería sino un antecedente de lo que daría lugar a la creación de una nueva organización que cambiaría el mundo. La ansía de paz ante lo que parecía una guerra sin fin llevó a más de 50 naciones a recuperar el término “Naciones Unidas” para redactar una carta en San Francisco entre abril y junio de 1945. No fue hasta octubre que el organismo entró en funcionamiento.
A día de hoy, la organización mantiene su esencia y continúa luchando por sus compromisos originarios: la paz y la seguridad internacional. Bien es cierto que el propio desarrollo de la sociedad ha llevado al organismo a afrontar nuevos retos globales, como la protección de los derechos humanos o la ayuda humanitaria a los países más desfavorecidos. Al mismo tiempo, uno de los retos más importantes a los que se enfrenta la ONU es conseguir los objetivos de desarrollo sostenible para 2030, con el fin de apoyar la sostenibilidad y la acción climática.
El organismo está formado por 193 países miembros. En 2011 se produjo la última adhesión, con la entrada de Sudán del Sur. Todos sus estados son reconocidos internacionalmente, excepto Ciudad del Vaticano, Palestina, la Orden de Malta, la República de China en Taiwán y el Sahara Occidental.