Las fuerzas armadas de Ucrania llevaron a cabo este domingo 26 una ofensiva de gran envergadura, empleando vehículos aéreos no tripulados en las afueras de Moscú, Tula, Kaluga, Briansk y Smolensk. La Defensa rusa afirma haber repelido el ataque, a pesar de que distintos aeropuertos se vieron obligados a interrumpir sus incursiones debido a la operación.
Este nuevo ataque se trata de una represalia por la arremetida rusa de este sábado, que supuso el envío de 75 drones a la capital de Ucrania.
Hasta este momento, las fuerzas aéreas rusas han logrado interceptar alrededor de una veintena de drones ucranianos en diferentes áreas del país, según denuncia el Ministerio de Defensa ruso.
El alcalde de Moscú, Sergéi Sobianin, ha destacado que se logró neutralizar el ataque antes de que llegaran a la ciudad. «En principio, no hay heridos ni grandes desperfectos» afirmó.
En contraparte, el Gobernador de la región de Moscú, Serguéi Vorobiov, ha anunciado que tres construcciones han sufrido diferentes daños. Por este motivo, 13 vuelos fueron pospuestos y tres cancelados, aunque actualmente se han reanudado las actividades.
En la región de Tula, el ejército ruso interceptó dos drones. Sin embargo, no pudo evitar que uno de ellos se estrellara contra un edificio residencial, causando heridas leves a uno de sus residentes.
Los servicios de seguridad de Kaluga no han proporcionado información sobre la cantidad de drones que han llegado a su territorio, pero afirman que no hubo daños en las infraestructuras civiles durante el ataque.
Briansk, por su parte, notifica que cinco drones atentaron contra su región, según su Gobernador Alexandr Bogomaz.
Finalmente, Smolensk, también informó un ataque con drones en su región, y afirma que los servicios de emergencia trabajan en las zonas afectadas.
Para más información sobre la situación en Rusia y lo sucedido en las cinco regiones, consulta nuestro mapa interactivo.
